domingo, 3 de abril de 2011

Sobre el alcohol

Hoy hubo una serie de eventos desafortunados con relación al alcohol y quisiera escribir un poco sobre ello. Se armó un conflicto en mi círculo de amigos más personal (conflicto sobre el que no quisiera entrar en detalles) y terminó por agravar más mis pensamientos sobre estas dos pequeñas drogas.

Yo, personalmente, opto por no beber alcohol. En algunas circunstancias puede llegar a ser agradable para la gran mayoría de personas... pero yo no le encuentro la gran gracia. Lo probé a su momento, lo reconozco, pero precisamente por eso no puedo encontrarle un gran sentido. No es un gran placer, sino que en mi opinión, lo considero una vía de escape la mayoría del tiempo. Y cuando se usa para "pasarla bien", siempre termina generando malestar a largo plazo, como los famosos vómitos y los dolores de cabeza al día siguiente; sumado a todas las otras características que afectan el comportamiento. Lo más paradójico es que pese a todos las consecuencias la gente lo sigue consumiendo. Les encanta vivir así. Yo los problemas los afronto sobrio, sin darle demasiadas vueltas al asunto; y si hay que pasar por barro metafórico... ¡Pues entonces hay que cruzarlo rápido! Y si no pueden pasar un momento con amigos sin alcohol, ¿Por qué tienen que llegar al extremo de la ebriedad?

Maldición, no soy un moralista ni cosa por el estilo: El alcohol y los cigarros son un tema de elección personal. Si lo van a hacer y dónde lo van a hacer me da exactamente lo mismo. Hacerse daño a consciencia o inconscientemente también es decisión de cada uno, pero como los efectos no son inmediatos la mayoría los fomenta hasta que es demasiado tarde. Es triste, pero es verdad, saber que hay gente que cuando sufre las consecuencias piensa "de haberlo entendido antes lo hubiera dejado". Eso es no tener con sus propios actos, ¿No?

El alcohol me molesta sobremanera, y se que no he llegado a ningún argumento nuevo. Ya se que ni siquiera vale la pena gastar mi tiempo en estas palabras que escribo. Y sé que entendería mil y una veces mejor a los ebrios si es que por una vez compartiera aquel vicio con ellos...

...y semejante acto no está en mis planes. No creo que llegue a estarlo nunca.

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