lunes, 9 de mayo de 2011

Sobre Hydroaysén


 El día de hoy me enteré de que aprobaron Hydroaysén; el proyecto lucrativo y destructor de naturaleza más grande que haya experimentado Chile; quizás,  aunque pueda exagerar, el mundo (al menos el que conozco).

Los hombres con dinero volvieron a ganar, demostrándole a este país que no importa que pienses diferente a la voluntad de la minoría con poder; si es un negocio rentable, conveniente... y puedes pintarlos con colores "patrios" y falsos ideales de progreso, lo van a aprobar aún cuando todo el país esté en contra suya.

Me enfurece el pensar, incluso, que esta fue una de las campañas que más tiempo circuló. Se hizo más pública que la de Pascua Lama, se llamó desde etapas muy iniciales a oponerse a estos proyectos, se ofrecieron mil y una soluciones y vías alternativas... pero no. Presentan Hydroaisén como la "única solución", como la necesidad desesperada por energía y como fuente de empleo y progreso para nuestro país. A otro perro con ese hueso; toda la gente informada sabía lo que estaba ocurriendo y levantó la voz en protesta. Académicos y hombres con conocimientos se alzaron en contra, dándole más peso a la situación. Cada vez eran menos los desinformados o los que estaban de acuerdo con este ridículo proyecto; e incluso es más: Ni siquiera las "campañas del terror" de la compañía o las falsas promesas de felicidad hicieron mella en los que querían un cambio...

Y aún así, Hydroaysén fue aprobado. ¿Por qué es tan difícil escuchar a la gente de una buena vez? Porque es más conveniente no escucharla y hacer lo que sea mejor para el bolsillo. Así funciona la cosa: El gobierno aprueba y el derecho los respalda, ¿Qué mejor?... ¿Representatividad? ¡Para nada! ¡Mentiras para ganar votos y luego hacer lo que les dé la gana! ¡Sólo la presión pública puede lograr cosas!... ¡Y apenas, pues al parecer hoy no fue suficiente! Vivimos en un país que sería capaz de declararle la guerra a otro si encuentra intereses económicos en él; todo en nombre del dinero, "la raiz de todo el mal". Luego no faltarían los que lo encontarían "visionario", "patriótico", "heróico" y así lo escribirían en la historia, que escribe siempre del lado de los que ganan y es capaz de justificar lo injustificable con el tiempo; después de todo, como los hechos no se repiten, todo está perdonado de antemano... razón por la que me encantaría que la idea Nietzscheana del eterno retorno, expresada por Kundera en las primeras páginas de "La insorportable Levedad del Ser", fueran auténticas y reales.

Y los partícipes de la aprobación de este horrible proyecto se deben estar ríendo de nosotros en este momento; creyendo que "lo han hecho de nuevo" y que ahora se viene lo bueno. Pero sé que la fiesta les va a durar poco. Su miedo a la violencia ya les ha hecho desplegar a las fuerzas policiales ante las protestas en las calles. Su odio visceral a la rebeldía y la colaboración de estos hombres y mujeres en la labor de silenciar las voces de protesta sólo producen más insistencia y más resistencia. ¡Vamos! Los yankees no han podido colarnos lo de la muerte de Bin Laden... ¿Y los empresarios quieren que nos traguemos las mentiras de Hydroaysén? ¿O del caso bombas? ¿O quieren que no nos creamos el abuso que sufren los Mapuche día a día? ¡Nos creen idiotas! Pues se equivocan...

Se dice que el hombre no aprende de sus errores. En este caso es triste y desgraciadamente cierto con respecto a aquellos que, como en las antiguas épocas industriales, mataban a sus trabajadores sin reparar en las consecuencias. La patagonia no es un caso diferente. Pero veremos con el paso de las horas, quizá también de los días, si algo puede hacerse con tanta protesta que van a recibir en este momento los responsables de esta calamidad. Si eso no funciona... bueno; habrá que seguir insistiendo. Algo de todo este odio y rechazo habrá de quedar registrado a futuro. Más quizá que la peor decisión que se haya tomado a favor del dinero y no de la naturaleza.

"La venganza de Gaia vendrá"
Saludos

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